Manejo del riego agricola

Manejo del riego agricola

Para llevar a cabo un riego de manera eficiente, no es suficiente aplicar el agua en el suelo. La irrigación es una técnica capaz de ofrecer el aumento de la productividad y la calidad de los productos agrícolas, sin dejar de mencionar la reducción del riesgo de pérdida de producción causada por períodos de sequía. La gestión del riego es una técnica que consiste en monitor y cuantificar, periódicamente, el consumo de agua por las plantas que permite, por lo tanto, determina el tiempo necesario para la aplicación del agua necesario en cada riego.

Para llevar a cabo un riego de manera eficiente, no basta sólo con aplicar agua en el suelo. Es necesario, ante todo, conocer algunos parámetros que determinarán la cantidad de agua que debe ser aplicado, el momento y la intensidad adecuada.

Retención de agua en el suelo

El suelo es un sistema compuesto por una pieza sólida y otros porosos. La parte sólida está formada por minerales que se agrupan y constituyen los agregados, responsables de la estructuración del suelo. La parte porosa, a su vez, corresponde a los pequeños espacios que se forman entre las diversas agrupaciones de partículas sólidas.

Estos espacios, cuando tienen un diámetro más grande, son llamados macroporos y el diámetro más pequeño de microporos. Así que, después de que una parte de agua de lluvia o riego es retenida en los poros del suelo para ser utilizada posteriormente por las plantas. El agua que ocupan los macroporos que esta menos tiempo disponible para ser absorbido por las plantas, porque eso será rápidamente dirigido a las capas más profundas, donde no llegan las raíces de plantas.

Determinación de la capacidad del suelo

La humedad correspondiente a la capacidad del campo puede determinarse mediante dos métodos: el método de campo y el de laboratorio.

Método de campo: el método de campo consiste en construir una pequeña presa, con una altura de unos 20 cm, rodeando un área de 3 m x 3 m y luego necesitará demarcar una subzona 1 central m2 y la saturación del suelo, suministro de agua hasta que no haya ninguna variación en la velocidad de infiltración de la misma a una profundidad de 1,5 metros.

Método de laboratorio: el método de campo es laborioso, lento y difícil de ser ejecutado. Por lo tanto, la determinación de la capacidad de campo, por lo general, se realiza mediante la curva de retención de agua, determinó en el laboratorio. La humedad correspondiente a capacidad de campo se obtiene con la tensión de 0.01 MPa (0.1 atm) para suelos arenosos y 0.033 MPa (0.33 atm) para suelos arcillosos.

La curva en caso de necesidad de determinar la retención de agua en el suelo, profesor Rubens de Oliveira y profesor Marcio Mota Ramos, los coordinadores de la irrigación – curso de gestión de cuándo y cómo mucho para regar, redactado por la CPT – centro técnico de producción, recomendamos buscando un técnico en el área (ingeniero agrónomo, ingeniero agrónomo, técnico agrícola o técnico de laboratorio de suelo) para dar más información sobre el procedimiento que debe seguir.

Fuente: agronomiaparatodos.org